danddaventuras - Partida 7, 8 y 9

Partida 7, 8 y 9

Mialee y Theren se despertaron derepente por los gritos Arawon. Miraron arriba aturdidos al ver a su amigo montado en un hipogrifo. Este aterrizo delante de ellos y se despidió cariñosamente de Hipofi, este se va volando al bosque a comer. Los tres amigos se pusieron a desayunar. Al acabar le explicaron a Arawon lo que estaban haciendo y él les contó lo que ha hecho. Arawon estuvo desarrollando su poder en la sala hasta que le mandaron con una guerrera eladrín a ayudarles pero para ello tenían que ir a coger montura a Elfines. Durante el camino se encontraron al enano al que robaron la espada y las monedas, el mismo que con su compañero eladrín intentaron matarles en las Cordilleras Sinuosas, llevaba con el nueve orcos esbirros. Arawon se enfrentó utilizando su poder de manos de fuego con el que los quemó hasta dejarlos en ceniza. La guerrera y Arawon atacaron al enano que lo dejaron con cortes, quemado y dañado. Al final la guerrera acabó con él clavando su espada en el corazón. Después de eso en el pueblo de Elfines se cargarón a tres bandidos que estaban matando a gente y que siempre iban a robar. Allí el conjuro nuevo de Arawon de la nube apestosa provocó la muerte de dos de la banda. A los dos les dieron hipogrifos y a Arawon componentes de rituales de cada clase para usarlos. Después de recuperar fuerzas con una poción salieron del bosque con los hipogrifos. Uno se lo quedó la guerrera y el otro se quedó con Arawon. Acabaron de desayunar y se pusieron en marcha a buscar los obeliscos del río. Andando por la orilla vieron el obelisco en medio del río y seis orcos esbirros protegiendo el disco. Entre ellos acabaron con ellos seis a golpe de espada y vara. Sus desechos quedaron esparcidos por la orilla. Arawon cogió el disco y eso se transformó en un gran orco con un mazo. Mialee atacó al orco con su espada dándole cortes tajantes que lo hecho algo hacia atrás, Theren le atacó con su espada corta saltando a su espalda y dándole varios tajazos por la espalda casi rompiéndole la columna. Su ataque provocó que se tambalease y al final se cayó en el río. Arawon lanzó de la punta de su vara una bola eléctrica al agua que provocó una explosión amarilla blanquecina que el orco lanzó un grito descomunal. Al final acabó bocabajo en el agua echando humo. Se volvió de color oscuro y se deshizo hasta convertirse en un disco de color rojo con el gravado de un orco con garrote. Arawon saltó al agua, lo cogió y lo colocó en la base del obelisco. Salió un rayo azul que los curó y restauró sus poderes. Fueron caminando buscando a lo largo del río el siguiente obelisco pero no vieron ninguno. Mialee, que tenía más aguante bajo el agua, se zambulló en el río y empezó a bucear por si veía el obelisco dentro del agua. Algunos metros adelante vio un obelisco hundido con algas y delante y disco con plantas y estrellas de mar pegadas a el. Lo cogió pero al transformarse soltó un vapor negro de hedor por lo que salió cuanto antes del agua. Cuando volvió a la orilla totalmente empapada corrió hacia sus amigos pues del agua también salió el vapor apestoso formando en tierra la figura de un zombi negro deformado. Los tres amigos se pusieron en posición de ataque. Arawon lanzó su bola de fuego que le quemó pero la capacidad de estar muerto le hizo regenerarse. Después le tocó a Theren que le hizo varios cortes profundos en el pecho. Mialee atacó a su espalda con su espada haciendo que chillase de dolor. Los tres se taparon las orejas por el ruido insoportable que emitía su garganta; los animales también salieron volando y corriendo de las cercanías. El hedor que desprendía era tan insoportable que les bajó la vida. El zombi atacó a Theren rasgándole la piel del pecho pero la herida no era grave. Entre los tres atacaron a la vez a la criatura dejándola tumbada en el suelo. Los tres gritaron de alegría pero el zombi empezó a brillar de forma oscura y al final explotó. Sus trozos se pegaron a ellos causándoles daños. El disco se volvió a formar con los restos que quedaban por el suelo. Mialee lo cogió y se metió al agua de nuevo a colocarlo. Cuando lo colocó en la base el obelisco empezó a brillar en un tono azul curándola a ella y a los demás. Tuvo que nadar hacia tierra firme en medio del temblor producido por el obelisco. Cuando se tumbó cansada en la arena echó agua por la boca. Los demás le preguntaron si había conseguido poner el disco en su lugar a lo que ella les contestó que sí. Ahora podían continuar su camino hacia el nuevo objetivo, las Cordilleras Entrenamiento. Estuvieron andando hacia ellas durante dos horas, hasta que llegaron al borde del terreno donde empezaban. Fueron cruzandolas escalando con la ayuda de las espadas y de la vara, eso les dejó fatigados pues llegaron al centro a las tres horas después de descansar bastante. Al llegar ya rendidos completamente bebieron agua de sus odres y comieron. Ante ellos estaban los dos obeliscos con sus respectivos discos. Fueron al derecho y al tocarlo Theren, se convirtió en un hipogrifo oscuro que empezó a volar. Theren le dio su espada bastarda a Mialee para ir más ligero y que ella diera mejor al blanco. Arawon podía dar a la bestia con su magia y Theren con su arco, pero Mialee no puede atacar con sus armas a un animal volador. Hipofi fue volando hacia ellos y descendió entre ellos. Mialee se subió a él y así poder atacar en el aire. Hipofi se elevó y fue volando con Mialee en su lomo hacia el hipogrifo oscuro, La guerrera empuñando ambas espadas en las manos atacó con un doble ataque al animal dejando heridas profundas. Theren sacó su arco y le disparó en el cuerpo en el pecho izquierdo. Arawon disparó de su vara una bola eléctrica que se descargó en sus alas haciendo que se le paralicen y caiga al suelo. Mialee atacó lanzando la espada bastarda a su cuello. El hipogrifo se desintegró formando un disco de platino con el grabado de la cara del hipogrifo con alas. Arawon cogió el disco y lo colocó en el obelisco. Un temblor sacudió la tierra y el obelisco se fue elevando hacia el cielo como cúspide formando debajo una montaña con peñascos en los lados para subir. Acordaron que Mialee subiera por la ladera mientras ellos dos subirían en Hipofi. La guerrera bajó del animal y se subieron ellos. Empezó a escalar Mialee por la ladera mientras los otros dos iban volando. A media montaña de la subida, Arawon y Theren la saludan diciendo que podía subir ella también en Hipofi pero como era peligroso podía subir agarrada a una pata. Esta siguió escalando lo que le quedaba con furia hasta llegar a la cima. Se encontró con el animal comiendo un conejo que ha cazado y los dos compañeros cocinando. Esta estuvo apunto de matarles por lo que ha sufrido subiendo así que la tranquilizaron y estuvieron comiendo los tres y descansando. Para cuando terminaron ya serían las tres de la tarde según la posición del sol. Mialee se encargó de coger el disco y al liberarlo surgió una criatura que suele estar en cuevas. Los tres se pusieron en posición de combatir, Mialee se dirigió hacia él y le dio unos estacazos que lo dejó débil. Entre Theren y Arawon le atacaron de tal forma entre espada y magia que lo fulminaron sin darle tiempo a golpearles. La criatura ya derrotada se convirtió en disco de oro. Mialee lo volvió a coger y lo colocó en el obelisco con lo que el octavo ya había sido eliminado. Los tres amigos se montaron juntos en Hipofi y salieron volando a su nuevo objetivo. Durante el vuelo por las cordilleras, el viento arenoso les retrasaba el viaje. El hipogrifo bajó al río a beber agua y a elevarse a la montaña pero al poco tiempo tuvo que volver a beber. Arawon utilizó su poder para sacarle lo que le hacia toser y beber agua abundante y le sacó una gran bola de plumas y arena hecha masa. Los tres se quedaron atónitos al ver lo que había formado en su garganta por el viento arenoso de antes. Decidieron buscar directamente los obeliscos de la montaña volando y no subiendo. Cuando llegaron volando al límite, derepente se vieron cayendo de la altura de un piso al suelo. Cuando estuvieron conscientes vieron a Hipofi convertido en perro ladrando y corriendo cuando Salió del territorio de la montaña se volvió a convertir en hipogrifo. Los tres pensaron que la montaña debía tener una magia que impide subirla volando. Así que sin más dilación fueron subiendo a pie por el sendero que dirigía a la cúspide. A un tercio de la montaña se encontraron con una cueva. Entraron y vieron que estaba iluminada por antorchas, en el suelo Arawon vió trozos de restos de cajas y candiles con aceite en su interior. El obelisco estaba en su interior y a pocos metros el disco. Theren lo cogió y se tuvo que apartar corriendo pues empezó a arder. El fuego se hizo una figura con alas pero de aspecto humano. Arawon lo identificó como un ángel del valor. Sus alas y su espada eran de fuego. Theren que estaba más cerca llegó a darle. Arawon pensó que aunque se desplazara estaría lejos así que cogió el candil y con su aceite lo esparció con magia hasta que llegase cerca del ángel. Una vez echo esto, agarró un trozo de madera y se deslizó con ello por el aceite hasta el ángel al cual le pudo golpear.

Mialee utilizó su escudo como tabla para deslizarse por el aceite. Al llegar donde el ángel, desenfundó las dos espadas y le hizo con ambas cortes profundos y certeros. El ángel atacó con su espada de fuego a Theren que le hizo un tajo. Se llevó la mano izquierda al pecho y jadeó profundamente. Entre los tres le volvieron a golpear con sus armas al ángel. Viendo cerca su final fue volando hacia la salida pero Arawon y Mialee no pudiendo alcanzarle a pie fueron deslizándose de nuevo hasta él. Mialee le dio fuerte golpes que le atravesaron y Arawon con su vara le atacaba. El ángel cayó y empezó a brillar hasta explotar en una llama de fuego oscuro y convirtiéndose en disco. Mialee volvió a deslizarse con su escudo por el aceite hasta Theren y recogió su escudo. Arawon se deslizó también con su trozo de madera pero se pasó de largo en la curva y se la pegó contra la pared de la cabeza. Mialee y Theren se rieron al verlo. Mialee utilizó lo que sabe de sanación para curarle la herida en la cabeza que era leve. En un principio no recordaba que tuviera el disco pero lo recordó y colocaron el disco en el obelisco, les curó con un resplandor marrón y se hundió en la tierra. Salieron de la cueva y continuaron su aventura. Solo quedaba uno y terminaría todo.